viernes, 8 de febrero de 2013

Tutorial: cake pops de San Valentín o cake pops románticos

¡¡Holaaa!!

Aquí va mi primer tutorial del año (espero llegar a tiempo para que lo podáis hacer para San Valentín). Ya sabéis muchas que tener dos peques, la casa, hacer pedidos, dar cursos, y alguna que otra "cosilla" más consumen muuuucho tiempo y horas de sueño, pero no me olvido de mi blog, ¡y menos aún de quienes lo leéis! Así que aquí me tenéis, al pie del cañón, ¡dándolo todo! Jejeje.



Podéis seguir pasando por aquí que todos los meses os tendré novedades, sobretodo tutoriales y trucos, y nuevos modelos de "cake pops" (sí, estos sublimes pastelitos con palo que el corrector ortográfico se empeña en llamar "epopeyas"), y entre medio, si consigo un poquito de tiempo pues artículos de otras cosas. Por supuesto, ¡estoy totalmente abierta a sugerencias y peticiones!

La verdad es que San Valentín es una fecha preciosa para aprovechar y hacer una cena romántica con tu pareja, yo solía salir a cenar cuando no teníamos las peques pero ahora hay que conformarse con intentar preparar algo en el comedor de casa jejeje, ¡es casi milagroso salir de la cocina! Este año con la bebé vamos a ver qué tal se nos da.



Hoy os traigo dos modelos de cake pops super sencillos de hacer y además otras ideas para poneros con locura a hacer cake pops románticos.



Esto es lo que vamos a necesitar:



Esta vez he experimentado a desmigar el bizcocho con la Kitchen Aid e ir añadiendo el queso crema, ¡y es estupendo! La Kitchen Aid va mezclando la masa (se parece a la de galleta) y la puedes ir tocando para saber cuándo está en su punto. Lo estará cuando con un pegotillo de masa puedas formar una bolita como la de la foto de más abajo.




Para dar la forma de corazón al cake pop he usado un cortador de galletas con forma de corazón. Hay que coger un puñado de masa, espachurrarla un poco procurando que quede alta y ancha, para que el cake pop sea grueso y que, al poner el cortador, la masa cubra todo el cortador.





Hay que retirar la masa sobrante, y luego, con mucho cuidado, hay que retirar el cortador presionando delicadamente la masa hacia abajo.



Llega uno de los momentos clave del cake pop: pinchar el palito previamente mojado en un poco de chocolate fundido, y a enfriar en la nevera (como mínimo dos horas). Preguntas típicas:
 - ¿Cuánto se clava? Un poco, más o menos hasta la mitad de la masa.
 - ¿Cómo? Con firmeza, sin prisa pero sin pausa.
 - ¿Y si se revienta? Corrígelo con los dedos. Posiblemente la masa fuera estrecha, vuelve a empezar (bola, espachurra, corta...).



Otro momento crucial: ¡el baño del cake pop! El Candy Melt fundido debe ser lo bastante líquido como para fluir por la superficie de la forma que hayamos hecho. Para licuar más el Candy Melt añadirle con mesura, progresivamente, aceite de girasol hasta conseguir la fluidez deseada.

A continuación y con la ayuda de mi peque Nora (se ve su manita jeje) ponemos el corazón de lado (cuando son cake pops de formas es mejor bañarlos así) y lo bañamos. Justo tras bañarlo, hay que ponerlo lo más vertical posible, e ir dándole vueltas y pequeños golpes para quitar el exceso de Candy Melt.



Tras el secado de la primera capa, meterlo hasta la mitad en chocolate rojo, sacarlo hacia arriba con cuidado, y lo vamos girando y quitando el exceso con el borde del recipiente, o ya cuando se le da la vuelta, un poco con el dedo muy delicadamente.




Una vez ya vemos que no escurre pero cuando aún no ha secado lo giramos y vamos echando los mini sprinkles de corazones.



Aquí tenéis un primer plano. Ya sabéis que para ver las fotos bien grandes sólo tenéis que hacer clic en ellas.



Llega hora de decorar con mini-rosas de fondant. En realidad son rosas muy sencillas como vais a comprobar. Hay que cortar y enrollar una fina lámina de fondant. Lo primero que se enrolle que sea muy pegadito (simulando el capullo), y después enrollamos pero como metiendo la parte central para adentro (hará más el efecto de los pétalos de la rosa, aunque en realidad esta rosa es muy de fantasía).




Y luego hay que cortar a ras (cuidado que se deforma) para que se pueda pegar bien al cake pop.

 

Como veis hay muchos tipos de rosas, cada cual que le de su estilo.




Hay otra manera de hacer los corazones: con el molde.



Una posible presentación del postre a compartir con vuestra pareja:


También me animé a hacer más diseños con el corazón de molde: en rojo y bañado de azúcar rojo, bola rosa y con un corazoncito pequeño de molde de fondant, mitad rojo (con una purpurina que parece como trozitos de papel) y mitad rosa y el último mitad rojo y mitad rosa decorado con sprinkles de corazones y chocolate rosa.



Espero que os haya gustado y que os animéis a hacer alguno, ya me contaréis qué tal os ha ido.

¡¡Feliz San Valentín!! Sed muy felices y disfrutad del amor.

Gracias por estar ahí.

Muchos besos
Nohemí